Hoy por hoy, el marketing se ha
convertido en una de las herramientas más útiles a la hora de mostrar un
producto o servicio y con los avances de la tecnología las oportunidades de ser
visible para el mundo se han multiplicado. Por esta razón, las industrias
culturales han encontrado nuevas formas de posicionar sus proyectos y han
logrado satisfacer, cada vez más, a sus consumidores.
Aquí les explicamos a fondo por
qué el marketing se ha convertido en una de las variables más importantes en el
área de la Gestión Cultural.
¿Qué es el marketing cultural?
El marketing cultural utiliza
herramientas del mercadeo tradicional para generar el intercambio de productos
y servicios, con la diferencia de que no siempre implica una transacción
económica, sino que en muchos casos puede hacer tangible de diferentes maneras.
Por ejemplo, podemos utilizar el marketing para que un determinado público
asista a una presentación gratuita de un artista que previamente ha sido pagado
por un tercero; pero ese público, está dando su tiempo además de su atención a
la obra, a su intérprete y creador. Esto también constituye un intercambio.
¿Qué es la cultura desde el
punto de vista del marketing?
Es importante resaltar que para
hacer marketing es muy valioso entender la cultura y el arte. Variables como:
el teatro, la música, la danza y la literatura, han sido ingredientes
fundamentales en los procesos del mercadeo, especialmente en lo que respecta al
diseño de envases, empaques, la publicidad y el visual mechandising donde se
recuerda el trabajo de Andy Warhol y Salvador Dalí para tiendas como Tiffany o
Bonwit Teller.
¿Qué importancia tiene el
marketing para la cultura y el arte?
Creo que viene adquiriendo un rol
mucho más relevante con el pasar de los años. En la medida en que las
organizaciones culturales buscan captar la atención de sus públicos y solventar
sus costos a partir de distintas fuentes, el marketing juega un papel cada vez
más importante. Cuando un museo, busca generar ingresos a partir de las
entradas a sus exposiciones, empezamos a ver estrategias de precio similares a
las que se utilizan en el marketing deportivo, la educación en línea o los
canales de comunicación. Por ejemplo, los visitantes en las taquillas de museos
como el Museum of Modern Art (MoMA), se enfrentan al dilema de comprar una
entrada por un día o por tan solo un poco más del doble del precio, un pase
para todo el año.
En materia de promoción vemos
cómo las marcas de productos se asocian a las exposiciones de arte, en muchos
casos se busca que los atributos de la obra, de su artista, de la galería o del
festival, se relacionen con los de la marca.
Esta disciplina, supone una
herramienta fundamental para dar a conocer los productos culturales y
artísticos de un modo eficaz, siguiendo un Plan de Marketing en el que se
desarrollen una serie de estrategias que nos permitan alcanzar determinados
objetivos. No se trata de realizar acciones o tácticas sobre la marcha, sino que
todo tenga continuidad y coherencia con los valores de la organización cultural
en cuestión.
El Marketing Cultural está
dirigido a todas aquellas actividades relacionadas con el arte y la cultura,
desde la promoción de un monumento, a la presentación de un libro o a la
organización de una exposición.